¡Hola a Todos! Como les había prometido, acá va la segunda parte de la escapada a Santa Cruz. Día en el que por fin vistamos la Viña Viu Manent, y pudimos reservar una mesa en el Restaurant Rayuela.
Como habíamos quedado en el final del paseo a Lolol el día Domingo, les cuento que luego volvimos a Santa Cruz. Nos relajamos una hora en nuestro Bed & Breakfast Cepa Noble, y luego fuimos al Casino a ver el partido de Chile. ¡Partido que nuevamente ganamos!
Luego del nerviosismo y la felicidad, nos fuimos al B&B y vimos el capítulo final de Game of Thrones. Después de esto, volvimos al casino a celebrar, y luego fuimos a dormir para aprovechar nuestro último día en el Valle de Colchagua.
Viña Viu Manent
El día Lunes, era nuestro último día, o nuestro último medio día. Así que lo aprovechamos 100% recorriendo dentro de la Viña Viu Manent. Reservamos una mesa, y para nuestra buena suerte, el día Lunes estuvo exquisito y muy soleado. Los días anteriores estuvo muy frío y con bastante neblina durante el día, así que fuimos afortunados.
Partimos disfrutando del Restaurant Rayuela, del cual dicen es un imperdible de la zona. Realmente acertado el comentario, están en lo cierto. Todo demasiado rico. La atención muy buena, y el lugar maravilloso. Así que decidimos almorzar al aire libre para aprovechar el sol. Les dejo fotos del restaurant y de nuestro almuerzo.
Después de almuerzo decidimos ir a las reposeras a disfrutar de la vista de la viña, para luego recorrer los maravillosos viñedos a pie. La viña realmente destaca por su belleza y tranquilidad, una vista aunque no panorámica, muy linda e ideal para descansar. Después de nuestro almuerzo, descanso y paseo, fuimos a la casa de Viu Manent a ver la sala de Malbec. Es importante saber que Viu Manent descata por su excelente calidad en vinos de cepa Malbec.
Les dejo algunas fotos de nuestro día en la Viña Viu Manent. Y No se pueden perder la sección de viajes, pronto actualizaré reseñas de lugares que he visitado mucho antes de crear el blog.
¡Hola! Hoy quiero seguir con los posts de viaje. Feliz de compartir lo lindo que tiene Santa Cruz y las viñas del Valle de Colchagua.
Primero que todo, les cuento que he ido varias veces a Santa Cruz. Mi hermana trabajó en la Viña Montes, así que iba bastante seguido a verla y a hacer cosas juntas. Esta vez fui en plan de paseo y también pensando en compartir algo de lo que más me gusta de Santa Cruz.
Es por esto que voy a dividir el post en 2 partes.
Cómo llegar: Tomar la carretera 5 Sur, y tomar la salida a San Fernando (esta es la mejor opción por arreglos). La otra opción es entrar por la entrada a Santa Cruz que está un poco más al sur.
Santa Cruz, Sábado 25 de Junio:
Este día fue sólo para comer y descansar del viaje. Llegamos alrededor de las 15 hrs. y fuimos a almorzar a uno de mis lugares favoritos de Santa Cruz: Vino Bello Ristorante.
Este lugar es muy lindo, porque la ambientación y decoración da la sensación de estar almorzando en Italia. Se los recomiendo a ojos cerrados, la pasta es maravillosa y las pizzas también. Pidan los Gnocci 4 quesos y no se van a arrepentir. Luego de comer, fuimos a nuestro B&B, dormimos siesta, y en la noche salimos a caminar.
Viña Santa Cruz: Domingo 26 de Junio:
El día Domingo aprovechamos para hacer TODO lo que pudimos. Partimos yendo a la Viña Santa Cruz, camino a Lolol por la carretera I-72 hacia la costa. A aproximadamente a 25 kms. desde Santa Cruz. La mayor parte del día estuvimos en esta maravillosa Viña.
Nuestro tour partió a las 12 hrs. Muy buena hora para partir (pensando en desayunar tranquilamente y salir desde Santa Cruz tipo 11:20 hrs).
El tour dura 2 horas, y parte en la bodega de la viña. Acá explican cómo se realiza el proceso de vinificación, y las principales cepas con las que trabaja la Viña Santa Cruz.
Luego pasamos por un sector que es como un museo del vino, para luego bajar a la bodega de guarda en barrica de los vinos. Esta parte del tour me encanta, porque acá hicimos la cata de 3 vinos de la Viña Santa Cruz.
Luego de la cata de vinos, viene la mejor parte del tour,que es subir al cerro Chamán en teleférico. La vista es impresionante, se sube en turnos de 8 personas (4 en un huevito y 4 en el otro).
Se ven los viñedos color otoño maravillosos, en verano debe verse muy lindo también.
Al llegar al cerro Chamán hay una ruta para conocer algo de 3 culturas chilenas: Mapuche, Aymara y Rapanui.Primero entramos a una ruca Mapuche. En su interior, una exposición de sus joyas, y principales artefactos de cocina.
La segunda parada es una estructura Aymara, y la tercera parada, una casa de las que se hacían antiguamente en Isla de Pascua, y un museo de la cultura Rapanui.
En el cerro además hay un observatorio, el que utilizan para hacer el tour astronómico de la noche (que por esta vez no hicimos copa Centenario). Y junto al observatorio, la vista más espectacular de los viñedos Santa Cruz.
Terminamos de recorrer el cerro, bajamos por el mismo teleférico, y nos dirigimos al museo del automóvil.
El museo es muy muy lindo, con autos, camionetas, micros y motos antiquísimos. Les dejo algunas fotos para que puedan apreciar lo que más me gustó de esta viña.
Luego de estas fotos pueden seguir leyendo sobre el almuerzo y Lolol.
Almuerzo
Luego de salir de la Viña Santa Cruz tipo 16:30 hrs. fuimos a almorzar a Las Delicias de Lolol.
Llegamos a Lolol, vimos una especie de feria costumbrista en la plaza, pero pasamos directo a almorzar. Entramos, y era un lugar pequeño, con apariencia tipo picada y muy acogedor. La modalidad era menú con ensalada, plato de fondo, postre y café.
Yo pedí una plateada con puré picante, y mi pololo un “lomo borracho” con puré rústico. Realmente lo más bueno que he probado en mi vida. Un sabor sublime, ni la abuela de masterchef cocina tan rico como la cocinera del restaurant
El precio del menú es de $10.500 y debo decir que los valían. Me terminé comiendo 3/4 del plato, cuando juraba que no me iba a poder ni la mitad. Así que después de ese reponedor almuerzo, caminamos hacia la plaza de Lolol a ver qué la feria. Terminamos comprando una miel de Ulmo, 10 tortillas de rescoldo, y 10 calzones rotos.
*El término del día Domingo se los cuento en el próximo post. Que fue el día en que volvimos a Santiago.
Hola a todos!!! Qué tal va su semana?!! Espero que muy bien. Ya empezamosDiciembre, mes de las fiestas familiares, mes en el que empieza el verano, de salidas con amigos y familia, y mes en el que quizás todas hacemos un balance del año que ya se va. Yo en general me quedo con lo bueno, y lo malo también representa algo bueno para mi porque es un aprendizaje más, más experiencia y saber lo que queremos y lo que no.
Bueno, hoy quiero mostrarles una parte de mis vacaciones, un lugar que me enamoró por su buena vibra y el relajo en cada lugar y esquina: Caye Caulker, Belize o Cayo Caulker, Belice en español.
Cuando Madonna cantaba “La isla bonita” hablaba de San Pedro, una isla que está un poco más arriba de Caye Caulker, pero la verdad quisimos conocer Caye Caulker, y no San Pedro, porque es un destino más visitado por jóvenes, más raw, lleno de arrecifes de corales y lugares donde hacer snorkeling y bucear, más relax y menos urbanizado. Por su pequeña extensión de 8,2 km. a lo largo, nos parecía un punto perdido en medio del mar Caribe y no nos equivocamos 🙂
En Belice el idioma es inglés, me sentía como en Jamaica o algo así sin nunca haber visitado Jamaica, la gente es muy amable. Hay muchos restaurantes, cafeterías, bares, heladerías en la calle principal, es todo un mundo! Cuando fuimos había sido hace un semana la fiesta de la Langosta, porque era la época en que más abunda la langosta. A mi no me gusta, pero a mi pololo le encanta, así que comió mucha langosta, hasta hamburguesa de langosta! así que podríamos decir que es el paraíso de la langosta, porque además es muy barata, y los tenedores libres también la incluían en sus parrillas. Yo la verdad comí Snapper todo el tiempo, nunca supe qué pez era en español, y ahora que he buscado, no parece ser un pez que haya acá en Chile, pero es exquisito, entre la reineta y la merluza austral, soñado!
Fish & chips de snapper
Les cuento que en este Cayo hay hasta un starbucks, pero adecuado al estilo de Caye Caulker, onda relax, de madera. Tiene una onda muy gringa, canchas de basketball que son ocupadas en todo momento por los niños y jóvenes. Recorrimos el Cayo, a lo largo, caminando en alrededor de 1 hora (bueno, la mitad del Cayo porque está fracturado luego de un huracán), y nos asamos, así que les recomiendo que lo hagan en Bici!
Ahora, como no es una isla, no tiene playa, es decir, no tiene arena antes de entrar al mar, entonces el mejor lugar para entrar al mar y bañarse es el Split, el lugar donde se dividió Caye Caulker luego de un huracán. Justo ahí hay 2 bares que tienen un deck de madera (o muelle de madera) para tomar sol, yo prefiero el que se llama Split.
Split
Desde el Split
El Split es el lugar donde tienen que tomar sol, es un bar restaurant, que vende todo lo que quieras tomar y comer, y a la hora del sunset, la gente se pone a bailar un poquito más efusivamente, porque hay música todo el día y en verdad es como una poolparty pero seaparty en este caso, nosotros estábamos en el lugar pero un poco alejados, porque en verdad no nos daba para estar tomando todo el día, sino que queríamos nadar, tomar sol y un par de cervezas. La cerveza nacional es la cerveza Belikin, muy ligera y refrescante, nos encantó.
Como estuvimos 2 noches y perdimos la mitad de un día, no pudimos reservar espacio en el barco que da un paseo por muchos arrecifes de colores y van a visitar tortugas, manatíes, tiburones etc. Dan almuerzo y para tomar libre, les recomiendo la agencia de turismo que me recomendaron, al que un día tendré que volver: Big Hawk. Y desde acá hay un tour al Blue Hole, que es una de las cosas que deberíamos ver antes de morir, es bastante lejos así que toma un día por lo menos. Les recomiendo quedarse al menos 3 o 4 noches para poder ver todo lo que hay en el mar, así que tendré que volver!
Todo fue disfrutar, tomar sol, nadar, caminar, conocer y comer rico y productos demasiado frescos, les dejo las última fotitos para que se motiven y conozcan un lugar paradisíaco y demasiado buena onda. Amé Caye Caulker!
Si tienen dudas, no olviden enviarme un correo a hola@welivenomad.com si necesitan saber cómo llegué y cómo me fui desde Caye Caulker (es imprescindible subirse a una lancha). Un beso y muy buena semana!
Hola a todos!!! este post es para los que amamos viajar y conocer lugares nuevos. Hoy les contaré sobre Tikal, la cuna de la civilización Maya.
Siempre se habla de los Mayas como una civilización que habitó mayoritariamente el área donde hoy está México, o al menos era lo que yo había visto en museos y libros, sin ahondar mucho más allá. Y siempre quise conocer esos grandes y misteriosos templos, que albergaron a una de las civilizaciones más importantes de América y del Mundo.
Investigando un poco más (y buscando lugares distintos y exóticos para ir de vacaciones) me di cuenta que había un lugar en donde el asentamiento Maya había sido mayor en número y muchos más años de existencia: Tikal.
Tikal está dentro del departamento de Petén, ubicado en Guatemala. Es uno de los hallazgos arqueológicos más importantes dentro de Guatemala y el mundo Maya, es patrimonio de la humanidad y recibe muchísimos turistas, cada vez más, a medida que restauran el lugar.
La extensión del parque Nacional Tikal es alrededor de 1600 hectáras, y el área que se puede recorrer de la ciudad Maya de Tikal es bastante menor, 20 kilómetro cuadrados. Para llegar a Tikal,alojamos en la isla de Flores, una hermosa isla, junto al lago Petén, que tiene varios restaurantes, bares y agencias de turismo. Decidimos tomar sólo transporte ida y vuelta, y comprar un mapa de la ciudad Maya, porque la verdad con tanto que conocer, preferimos andar a nuestro ritmo y conocer gente que estuviera en la misma que nosotros. Dicho esto, conocimos a Peter de Amsterdam, y a George de Rusia (en realidad se llamaba Georgi, pero la verdad no sé como se escribe en ruso, pero nos dijo que George era mejor para él) y nos pusimos a caminar por la ciudad selvática de Tikal.
Les cuento que estuvimos desde las 10 de la mañana hasta las 4 de la tarde, y pudimos recorrer toda la extensión de la ciudad. Hay tours nocturnos que parten a las 3 A.M. y se puede ver el amanecer (una amiga Suiza nos dijo que era increíble, pero la verdad con el ritmo de viaje, estábamos un poco cansados para ver el amanecer en esta oportunidad).
El entorno es precioso, y se puede ver fácilmente, a monos aulladores, muchos pájaros distintos, y con mucha suerte, pueden verse coatíes (tuvimos la suerte ese día, porque son animales muy tímidos y andan en grupo). Hace muchísimo calor, así que recomiendo que lleven algún sombrero, hidratación, y un abanico…ah!! y como es selva, también llueve a ratos, así que lleven su chaqueta “anti-agua” delgada. Yo no la llevé, pero con lo denso de los árboles, uno puede arrimarse y dejar que la lluvia pase, o dejarse mojar de plano, porque ayuda a capear el calor.
La mayoría de los templos está a la vista (suena raro, pero como no hay tantos recursos en Guatemala, se han demorado mucho en “descubrir” los templos porque están cubiertos de barro, y los trabajos son lentos y supervisados por arqueólogos). Hay templos que son enormes, y hay uno particularmente grande, el Templo IV o Templo de la Serpiente, que mide 70 mts. de alto. Sobre este templo, puedes ver toda la selva sobre los árboles y la vista es preciosa, es como estar en el cielo.
Les dejo fotos de lo que fue ese día en Tikal, y Flores. Lo recomiendo totalmente.
Hola a todos! Hoy les quiero mostrar un lugar increíble dentro de Guatemala, casi un espejismo, digno de ser uno de los lugares más lindos que he visto en mi vida: Semuc Champey.
Para visitar Semuc Champey, tomamos un shuttle desde Antigua a Lanquin, que es donde nos quedamos para visitar este santuario natural. Lanquin está a 1 hora aproximadamente (en un camión tipo real camión, abierto, sin asientos).
Nos quedamos en un lugar muy bueno (bueno dentro de la oferta de Lanquin, que es selva, al igual que Semuc Champey) en el hostal El Muro. Les aviso que este lugar es cero lujoso, tenía piezas bastante cómodas con todo lo necesario para poder dormir tranquilos, un desayuno exquisito, y el dueño y sus trabajadores extremadamente buena onda 🙂 aunque igual al ser selva, estaba lleno de insectos en todos lados y el ruido selvático de la noche casi no me dejó dormir.
Luego de pasar la noche en Lanquin, el camión pasó por nosotros tipo 8:30 hrs. y ya éramos los últimos que recogía el tour. Este lugar, y Guatemala en general, como otros países de centro América, es muy visitado por europeos y norteamericanos, porque además de ser precioso, es bastante seguro y se siente muy buena vibra en todos lados.
Lo primero que hicimos, fue hacer tubbing, que es recorrer un río arriba de una cámara de neumático jajaja… no tengo fotos del tubbing porque, entre que fuimos pie pelado en traje de baño, y dejamos las mochilas guardadas, no daba para andar con cámara o celular. El río que está a mis espaldas es donde nos lanzamos en neumático.
Luego del tubbing y asegurarnos que todos estaban bien, subimos al puente, y los valientes, se tiraron del puente hacia el río (aprox. 11 metros de altura). Yo no fui parte de esos valientes 😛
Luego de esto, fuimos a la entrada del Monumento nacional Guatemalteco Semuc Champey. Caminamos alrededor de 45 mins. por la selva (subida, bajada, piedras, etc) estaba muy muy húmedo y caluroso, así que no nos quedó otra que sacarnos la polera y andar en shorts y traje de baño. Luego de la caminata, llegamos al mirador, un lugar que me dejó sin palabras, porque desde acá se ve el río casi como una postal, realmente es surrealista. El mundo en el que vivimos es realmente una joya.
Luego llegamos al río Semuc Champey a la bajada del mirador, nos metimos al río y me sentía realmente como la protagonista de la película Laguna Azul, muy agradecida y no creyendo lo que veía, extasiada mirando el agua desde el interior, sus colores, los peces (que nos comían los pies literal) y pasamos desde una terraza de agua hacia la otra más abajo por unas caídas de agua que eran como resbalines naturales. Se puso a llover y ya no podía más de felicidad y agradecimiento, fue un momento sumamente sublime, además de entretenido.
Finalmente, al salir del río (porque nos esperaba el tour para volver a Lanquin) se puso a llover como si estuviéramos bajo una ducha, así que intentamos proteger las mochilas con nuestras chaquetas, y mojarse era lo más lindo de todo, así que aunque llegamos como sopa al camión y al hostal, todo valió demasiado la pena. Nos duchamos, comimos en el hostal, y a la cama temprano, para partir temprano a Flores, que era el lugar de hospedaje más cerca de Tikal, nuestro próximo destino y post de viaje.
Les dejo algunas fotos para que puedan admirar un poco de la belleza de nuestro planeta, nuestro hogar. Espero que lo disfruten y se animen a visitarlo alguna vez en la vida 🙂
Un besote! María Paz xx.
Si tienen dudas, sólo pregunten a nuestro correo: hola@welivenomad.com
Hola! cómo están?! por acá muy animada, porque ya ha llegado el solcito (al menos por esta semana) y se siente la primavera, se pueden ver los árboles en flor, y eso significa que también viene el verano y el calor.
Hoy quiero mostrarles un lugar maravilloso en Guatemala, que hay visitar alguna vez en la vida: el Lago Atitlán.
El lago Atitlán se encuentra en el departamento de Sololá, Guatemala. Lo más lindo de este lago, es que está rodeado de 3 volcanes: Atitlán, Tolimán y San Pedro, así que el paisaje que puede observarse desde los distintos miradores y muelles de Panajachel es simplemente sublime. Estuve durante horas recostada en un pequeño muelle observando la majestuosa naturaleza, me considero una persona afortunada, y por eso estoy agradecida 🙂
Fuimos en un tour por el día, desde Antigua Guatemala, para no perder tiempo (tiempo valioso porque teníamos todo organizado para visitar Guatemala, Belice y México en 2 semanas) y el bus demora 3 horas en llegar a Panajachel, uno de los pueblos que rodea el Lago. Desde ahí se pueden tomar botes o lanchas para ir a los otros pueblos, o un tour que recorre todos los pueblos. Nosotros preferimos recorrer Panajachel y disfrutar del paisaje desde ahí, sin cruzar, lo que hicimos fue sólo contemplar y agradecer la belleza de la naturaleza. Les dejo algunas fotos para que puedan imaginarse estando ahí, y puedan visitarlo algún día 🙂
Antigua Guatemala. Hoy comenzamos la sección Viajes con el primer post de viaje, para contarles un poco de el primer destino de mis vacaciones 2015: Antigua Guatemala.
Antigua Guatemala, era la Capital de Guatemala en la época de la colonia. Es una ciudad preciosa, con calles de piedra, en la que la arquitectura colonial está en todos lados. Acá se mezcla la arquitectura antigua, junto con las micros o chicken bus, que son muy particulares, porque eran buses escolares en USA, y los compraron para el transporte público. Incluso algunos siguen con su color amarillo y con el nombre del Colegio al que trasladaban los alumnos.
Les cuento que quedé gratamente sorprendida con esta ciudad, porque lejos de ser una ciudad peligrosa, es una ciudad limpia, preciosa, muy amigable para el turista (hay muchos extranjeros) las personas son amables, cariñosas, y se nota que ponen mucho amor en sus oficios, todo funciona, sólo que un poco lento. Les advierto que son muy relajados y andan siempre atrasados, el “ahorita vamos” o “ahorita llegamos” no existe, hay que armarse de paciencia y esperar.
Antigua Guatemala, ciudad colonial
Además hay muchísimas iglesias, algunas conservadas, y algunas no tanto (nos contaban que hace algunos años hubo un terremoto, y por eso varias iglesias y casas estaban siendo restauradas).
Los Guatemaltecos son muy amables y buena onda. Pero lo único que debo decir es que: “sale ahorita” o “ahorita viene” no es verdad jajaja, el transporte y los shuttle bus son un poco desordenados, así que ojo cuando quieran tomar un tour o trasladarse a otra ciudad, tienen que ir con tiempo. Les recomiendo elegir agencias de buen precio, porque finalmente, todas las agencias utilizan el mismo transporte.
Una de las cosas más lindas, es que en Antigua la mayoría de las mujeres visten a diario la ropa que ellas confeccionan, y que es típica de la zona. Conservan sus costumbres, y es común ver ferias libres en la calle, además del mercado de Antigua, en donde se mezclan todas las flores y colores de su cultura.
Estuvimos 2 noches en Antigua Guatemala, y recorrimos la ciudad en sólo un día, porque el día siguiente fuimos al Lago Atitlán. Les dejo algunas fotos de la ciudad.
